Una pareja en Argentina tuvo que dar en adopción a su cerdita porque ya no tenían cómo cuidarla. Puntualmente, Roma creció demasiado y la pareja no contaba con el espacio suficiente para darle una buena calidad de vida a la mini pig.
Mariela tomó la decisión de buscar a alguien que se pudiera hacer cargo de Roma. Las condiciones para quien quisiera adoptarla eran simples: tener el suficiente espacio en casa, tiempo de dedicación y amor.
Un familiar de un amigo de la pareja dijo que se podía hacer cargo de la cerdita en adopción, ¿qué mejor que dejar a Roma en manos de alguien conocido?
«Tras varias conversaciones deciden entregársela. La persona fue a buscarla y se saca la foto con la cerdita que está dando vueltas en las redes», señaló Fernando Pieroni, presidente de la fundación Planeta vivo, quien denunció lo sucedido en redes.
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EL NUEVO DUEÑO DE ROMA SE CANSÓ DE ELLA Y SE LA COMIÓ
Durante los primeros días todo parecía estar bien con la cerdita. El nuevo dueño de Roma le enviaba fotos a la pareja para enseñarles que todo estaba bien con ella.
De alguna manera, Mariela se quedó tranquila porque todo parecía estar bien; sin embargo, pocos días después le llegó una noticia muy desagradable: el adoptante se comió a Roma.
Según declaraciones de Pieroni, el nuevo dueño de la cerdita en adopción no estaba muy feliz con ella. Roma era muy inquieta para su gusto y un día cualquiera se cansó, la llevó donde un matarife y se la dio con la condición de que le diera unos buenos pedazos de carne a él.
Las conversaciones entre Mariela y el adoptante de la cerdita fueron publicadas en un grupo de Facebook en Argentina sobre adopción responsable. En uno de los audios, el nuevo dueño de la cerdita dice que «la chancha ya estaba en otro plano».
«El adoptante dijo que todo está en manos de sus abogados y que no es más que una operación informática contra él, pese a que él mismo subió la selfie con Roma y él mismo le dijo que ‘se carneó a la chancha’. Mariela está muy mal, recibió amenazas y denuncias por difamación. Están asustados y tristes. Vamos a hacer lo que esté a nuestro alcance para lograr algo de justicia», sentenció Pieroni.